Encuesta sobre el Diaconado en Australia 2025
La encuesta sobre el diaconado más amplia jamás realizada en Australia ha revelado retos y oportunidades para esta creciente vocación en la Iglesia católica “de abajo”.
por el Diácono Tony Hoban, Australia
En preparación para la reciente reunión nacional de formadores de diáconos, se realizaron encuestas sobre el diaconado a obispos, formadores, hombres en formación, diáconos ordenados y esposas de diáconos.
La tasa de respuesta más alta fue la de los diáconos, con un 21% de todos los diáconos actuales respondiendo a la encuesta.
Los resultados revelaron una serie de retos para el diaconado en Australia, así como grandes oportunidades.
Algunos retos clave: – Algunos obispos encuestados hablaron de una falta de candidatos al diaconado en su diócesis, (a pesar de que hay poca o ninguna promoción de esta vocación para atraer a estos hombres). – Algunos hombres en formación se sentían frustrados por la falta de un camino o programa claro hacia la ordenación. – De los diáconos ordenados, más de un tercio de los que respondieron a la encuesta se sentían cuestionados por su relación con el obispo o el párroco. Casi una cuarta parte señaló que una de las principales deficiencias de su propia formación era la falta de habilidades prácticas para administrar los sacramentos o una formación litúrgica inadecuada. – Las esposas de los diáconos expresaron su preocupación por el tiempo que sus maridos deben dedicar a las obligaciones eclesiásticas, lo que a veces tiene consecuencias negativas en el hogar.
Algunos aspectos positivos y oportunidades: – Los obispos encuestados apoyaron que la formación en línea estuviera disponible en sus diócesis, lo que reduciría la carga de las diócesis rurales y regionales que sólo pueden llevar a cabo la formación con recursos locales. La red de formadores de Australia quiere aprovechar un proyecto piloto que ya se ha llevado a cabo en Queensland, donde la archidiócesis de Brisbane ha apoyado a las diócesis regionales permitiendo la asistencia en línea (y ocasionalmente en persona) a sus sesiones mensuales de formación. Está previsto ampliar este modelo para que pueda ofrecerse en otras partes de Australia, reduciendo así un obstáculo para que las diócesis más pequeñas ofrezcan un programa de formación. – Más de la mitad de los diáconos encuestados se mostraron satisfechos con los ministerios que desempeñan y que varían desde el litúrgico hasta muchos otros ámbitos, como en prisiones, hospitales, visitas a enfermos y ancianos, y en instituciones de enseñanza. – Muchos diáconos valoran los aspectos académicos de su formación. – Menos del 15% de los diáconos encuestados mencionaron la supervisión pastoral como parte de su formación continua, lo que significa que hay una gran oportunidad para que más personas emprendan esta forma de apoyo obligatoria. – Muchas esposas desean participar más en las sesiones de formación y relacionarse más con otros diáconos y esposas. – La mayoría de las esposas de diáconos, cuando se les preguntó qué es lo que más les gustaría decirle a la esposa de un hombre en formación diaconal, tuvieron palabras de aliento y apoyo, pero con advertencias de que la vida será diferente que antes y que habrá que negociar algunos límites.
Actualmente hay unos 220 diáconos (permanentes) en Australia. Aunque el número sea menor que en Norteamérica y en algunos países europeos, sigue creciendo a partir de una base lenta en la década de 1990. En algunas diócesis, el número de diáconos ronda el 10% del total del clero.
El autor: El diácono Tony Hoban (con su esposa Annette) vive en Marsden Park, en la diócesis de Parramatta, Australia. Es presidente de la Asociación de Diáconos Católicos Australianos (ACDA) y vicepresidente del CID.